Sevilla, ubicada en el extremo sur de la península ibérica, es la capital de Andalucía y una de las ciudades más pobladas del territorio español. Aún retiene las características de sus antiguos pobladores árabes en sus edificios y monumentos, y ostenta el casco antiguo más extenso de España.
El río Guadalquivir, sus museos y parques, el tradicional tapeo y los bares de copas se mueven al compás de la música flamenca, que deja entrever el espíritu apasionado y alegre de Sevilla.
Caminar por las calles de Triana, recorrer los monumentos del barrio Santa Cruz, o dar un paseo por el parque de María Luisa son la mejor manera de conectarse con sus más arraigadas tradiciones, entender su folklore cotidiano y contagiarse de la energía andaluza.
En los meses de Marzo y Abril se llevan a cabo las dos festividades más importantes de la ciudad: la Semana Santa, de carácter religioso, donde se pueden ver las procesiones de 70 hermandades diferentes; y la Feria de Abril, una fiesta que viste la ciudad de casetas, baile flamenco y música en vivo, y donde se respira la esencia de Sevilla en todo su esplendor.
La Catedral de Sevilla es el tercer templo cristiano más grande del mundo. Su espectacular construcción de estilo gótico, alberga a La Giralda y el Patio de los Naranjos. Allí además se conservan los restos de Cristóbal Colón.
Con un marcado estilo árabe, el Real Alcázar es un conjunto de palacios del siglo IX que guarda amplios jardines en su interior, además de salones, patios, y otros elementos árabes y renacentistas.
El Archivo de Indias se encuentra alojado en un edificio renacentista de gran belleza. En su interior se conserva toda la documentación relacionada con la conquista de América.
El pulmón de Sevilla es el Parque de María Luisa, su jardín público más importante. Dentro de él se encuentran la Plaza de España y la Plaza de América. Su nombre hace honor a la Infanta María Luisa Fernanda de Borbón quién donó el espacio en 1893.
A orillas del Guadalquivir se eleva la Torre del Oro, llamada así porque antiguamente estaba revestida con azulejos dorados. Fue construida en el año 1220 y en su interior alberga al Museo Naval.
Los barrios de Triana y Santa Cruz son los más populares y concurridos de Sevilla. En Santa Cruz las calles estrechas, casas señoriales, y patios floridos son una estampa constante. Triana, con su orilla bañada por el Guadalquivir, desprende un especial y bullicioso atractivo, que por la noche se enciende en sus bares y esquinas.
Uno de los edificios más visitados de la ciudad es la Casa de Pilatos, símbolo de la arquitectura local del siglo XVI, se dice que es una copia del pretorio de Poncio Pilatos.
La Basílica de la Macarena es uno de los templos católicos más importantes de la ciudad, que constituye la sede de la Hermandad de La Esperanza Macarena.