Prepárate para un apasionante viaje a los rincones escondidos de Oslo. La capital de Noruega oculta entre sus calles un buen número de lugares que resultan apasionantes para el visitante, que encontrará en esta ciudad un oasis de calma y cultura único en Europa.
La cultura y forma de vida escandinava es un auténtico ejemplo para el resto del mundo. Su educación, su gran respeto por lo diferente y su alto nivel de vida causa asombro y envidia en todo visitante que llega a sus ciudades. Esto es algo que se refleja en cada calle, en cada viandante y en cada esquina de los rincones escondidos de Oslo que más llaman la atención a quienes los descubren.
Los rincones escondidos de Oslo más apasionantes
Comenzamos ya sin más dilación a introducirnos paso a paso en esos rincones que más apasionan a aquellos privilegiados visitantes que han sido capaces de descubrirlos a través de la geografía urbana de la ciudad.
El interior del Ayuntamiento de Oslo
Visto desde fuera, el Ayuntamiento de Oslo podría ser perfectamente una fábrica de galletas e incluso un colegio de los años 70. Sin embargo, bajo un edificio de ladrillo marrón que resulta poco atractivo para el visitante se esconden rincones verdaderamente bellos.
El interior del Ayuntamiento de Oslo es un espacio repleto de colores vívidos y luces brillantes. La cuidada decoración es un verdadero recorrido por el patrimonio y la historia de la ciudad y de todo el país.
Puesto que no está abierto al público a todas horas, es importante conocer sus horarios y poder realizar la visita, ya que la verdadera idiosincrasia del noruego se puede vislumbrar en el espectacular interior de este edificio peculiar que es uno de los rincones más espectaculares del estado nórdico.
Grünerlokka
Puede haber quien piense que los nórdicos son gente muy seria y poco dada a las excentricidades y creatividad. Nada más lejos de la realidad. Entre los rincones escondidos de Oslo destaca con fuerza Grünerlokka, la zona más diferente y original de la capital.
La vida cultural y el ambiente alternativo se dan cita en el barrio noruego de Grünerlokka. En sus calles se combina el arte urbano con tiendas realmente peculiares y bares y rincones que llaman poderosamente la atención del visitante.
Por todas partes te verás rodeado de toques kitsch, ambiente vintage, comercios realmente especiales y un aire moderno según tendencias que van de lo alternativo al hipster, pasando por la modernidad y creatividad de los tiempos.
Museo de los Barcos Vikingos
Es impensable hacer una visita por los rincones escondidos de Oslo y no perderse entre lo más curioso de su historia. Por eso es necesario hacer una visita al Museo de los Barcos Vikingos. Una verdadera gozada de lugar.
Las 212 esculturas del Parque Vigeland
Por último, decir que el Parque Vigeland no es precisamente uno de los rincones escondidos de Oslo. De hecho, es uno de los lugares más famosos de la ciudad. Sin embargo, ¿alguien ha sido capaz de ver las 212 esculturas que se ocultan a lo largo de su extensión?
Perderse por el Parque Vigeland y tratar de localizar sus más de 200 esculturas de granito y bronce que representan las expresiones y estados de ánimo humanos en verdadero tamaño natural es maravilloso. Eso sí, ten cuidado no te vayas a perder y no puedas volver a salir de este enigmático lugar.