Mendoza – Argentina – Turismo
Gastronomía, vinos, vida nocturna, contacto con la naturaleza y espectáculos culturales, son al menos cinco actividades a disfrutar al realizar viajes a Mendoza. Una ciudad de la zona central de Argentina, que deslumbra con sus verdes paisajes de viñedos y majestuosos entornos de montañas Que hacer… Enoturismo: Considerada una de las ocho capitales mundiales del vino, Mendoza sorprende con una de las Rutas del Vino más famosas de Sudamérica, en un mágico entorno de fincas, casonas antiguas y estancias en plena cordillera que albergan cerca de 1200 bodegas, de las cuales al menos 100 se encuentran habilitadas para recibir visitantes. Compras: Recorrer avenidas con sofisticadas boutiques o explorar pintorescos mercados artesanales, donde abundan las conservas y chocolates, es otra de las actividades imperdibles que hacer en Mendoza, destacando entre ellos sitos como la calle Arístides Villanueva y avenida Las Heras. Vida Nocturna: Para quienes gustan de la vida nocturna, Mendoza ofrece interesantes alternativas bohemias, especialmente concentradas en las localidades de Chacras de Coria, Challao y en la calle Arístides Villanueva, ésta última, con numerosas discotecas y bares, abiertos hasta altas horas de la madrugada. Excursiones: Entornos de precordillera ideales para la práctica de deportes aventura y actividades de contacto con la naturaleza, terminan por enriquecer la oferta turística de la ciudad, albergando desde ríos y embalses que permiten la práctica de rafting y kayak, a cerros ideales para la práctica de alpinismo, paracaidismo y parapente.
Bariloche – Argentina -Turismo
Escenarios de bosques, lagos y montañas, centros de esquí, mercadillos de artesanías y encantadoras chocolaterías son parte de los atractivos que cautivan a quienes realizan viajes a Bariloche, una mágica ciudad inmersa en medio del Parque Nacional Nahuel Huapi, considerada uno de los destinos más famosos de la Patagonia. Que hacer! Compras: Bariloche tiene una vasta tradición artesana, albergando numerosos mercadillos y tiendas, donde es posible adquirir diferentes trabajos originales en vidrio, textil, papel, madera, macramé, metal y cerámica. Disfrutar de la gastronomía local: Otro de los imperdibles de Bariloche, es la degustación de chocolates, producto típico de la ciudad, fácil de encontrar en las numerosos chocolaterías dispersas en su centro histórico. Excursiones a sus entornos naturales: Visitar algunas de las reservas naturales o navegar por el Lago Nahuel Huapi, es una opción ideal para quienes gusten de la naturaleza y la aventura, existiendo un amplio abanico de excursiones que permiten descubrir los hermosos entornos de la ciudad. Esquiar: Durante la temporada de nieve es posible de disfrutar de este deporte en los numerosos centros de esquí de la ciudad, entre los cuales figuran el Cerro Catedral, considerado uno de los mejores centros de esquí del continente. Recorrer la ciudad: Finalmente una actividad que no puede faltar, es simplemente recorrer su pintoresco centro cívico, con arquitecturas en madera y piedra verdosa que recuerdan las construcciones típicas de las zonas montañosas suizas o austriacas.
Río de Janeiro – Brasil – Turismo
Conocida como Ciudad Maravillosa, una ciudad que deslumbra con la jovialidad de su gente, sus hermosas playas y la exuberante foresta que tapiza sus enormes cerros, configurando un escenario de ensueño, que año atrás año sigue liderando rankings como uno de los mejores destinos del mundo. ¿Cómo viajar a Río de Janeiro? Por avión: Desde las principales ciudades del mundo y Brasil, se pueden realizar viajes a Río de Janeiro en avión, arribando según destino de procedencia a uno de los dos aeropuertos de la ciudad. El aeropuerto Internacional de Galeão, situado a 20 kilómetros, es el encargado de recibir vuelos internacionales; mientras que el Aeropuerto Santos Dumont, situado a 2 kilómetros, recibe los vuelos nacionales. Por bus: También desde ciudades brasileñas, como desde otras ciudades de Sudamericana , se pueden realizar viajes a Río de Janeiro en bus. La estación de llegada, a donde arriban los buses, corresponde a la Terminal de Buses Novo Rio, ubicada en el centro de la ciudad. ¿Cuándo ir? Río de Janeiro, cuenta con un clima tropical atlántico, presentando dos tipos de estaciones: Una estación lluviosa, entre los meses de diciembre a abril, y una estación seca, que se extiende entre mayo a noviembre. La estación lluviosa, por una parte, presenta una notable mayor humedad, precipitaciones y temperaturas, estas últimas, con medias máximas cercanas a los 28°C, las cuáles aumentan a 30°C, en enero y febrero, los dos meses más calurosos del año. La estación seca, mientras tanto, cuenta con menor humedad, menos precipitaciones (aunque no por ello dejen de presentarse) y temperaturas más frescas, presentando máximas medias en torno a los 23°C en febrero y 18°C en julio, el mes más frío de la ciudad. En general, por su agradable clima, se considera que la temporada seca, entre mayo a noviembre, es la mejor época para realizar viajes a Río de Janeiro, aún cuando la ciudad no deja de ser hermosa para ser visitada, en cualquier época del año. ¿Qué ver? Conocida como Ciudad Maravillosa, Río de Janeiro cuenta con una inagotable variedad de atractivos, entre los que figuran impresionantes maravillas naturales, barrios llenos de vida, joyas culturales e impresionantes obras urbanas. Entre sus numerosas maravillas naturales, destacan sus enormes cerros con foresta, conocidos como El Corcovado y Pan de Azúcar , ambos sitios de espectacular belleza escénica, donde es posible obtener vistas panorámicas de la ciudad. También dentro de sus atractivos naturales, destacan sus hermosas playas de arenas blancas bañadas por el Atlántico, algunas más escondidas especialmente apetecidas por quienes buscan la soledad y otras siempre concurridas y llenas de vida, como las celebres Ipanema y Copacabana. Otro de los grandes atractivos de la ciudad, lo constituyen su mosaico de barrios, con áreas que destacan por su lujo y paisajes como Leblon o Ipanema, zonas que cautivan por su incesante vida nocturna como Lapa o barrios que simplemente encantan por su invaluable patrimonio, como el Centro Histórico o Santa Teresa. Carnaval de Brasil: Otro imperdible en Río de Janeiro El Carnaval, celebrado la última semana de febrero o inicios de marzo, corresponde a una de las fiestas más famosas de Brasil, reuniendo a las mejores escuelas de samba del país, para desfilar en el Sambódromo de Río de Janeiro ante más de 75.000 personas, por 4 días. El programa se basa en la competencia de diversas escuelas de samba en distintas categorías, quienes en 80 minutos ponen en escena una temática elegida por ellos, desfilando con coloridos disfraces y carros alegóricos. Los primeros desfiles, son realizados por el llamado Grupo de Acceso de Oro, conformado por 19 escuelas de samba. La escuela ganadora, además de ser premiada, es recompensada con la posibilidad de desfilar el año siguiente en la categoría superior, dada por el Grupo Especial. Los siguientes desfiles son llevados a cabo por el Grupo Especial, marcando el punto culminante del Carnaval, de este grupo conformado por las mejores 12 escuelas de samba, es elegido el campeón, que vuelve a desfilar en el desfile final de la Victoria. De forma paralela al programa oficial desarrollado en el Sambódromo, se pueden encontrar tantocientos de fiestas simultáneas, como incontables blocos de samba desfilando entre las calles de la ciudad. Algunos consejos y recomendaciones Dinero: En la ciudad es posible cambiar dinero tanto en sucursales bancarias, casas de cambio o agencias de viaje. En general es mejor evitar los bancos, tienen filas largas y el cambio suele ser más desfavorable. Seguridad: Río de Janeiro es una ciudad bastante insegura, siendo necesario tomar medidas básicas para protegerse de situaciones de riesgo. Es preferible evitar las zonas no turísticas y se debe tener cuidado con la ostentación de artículos de valor. Además, es preferible retirar dinero en cajeros automáticos situados en espacios cerrados, considerando que la clonación de tarjetas es común. Carnaval: Si se realizan viajes a Río de Janeiro en temporada de Carnaval, es imprescindible tener una reserva previa de hospedaje, pues simplemente es imposible encontrar alojamiento con los miles de turistas que visitan la ciudad durante esos días. Vestimenta: Si se viaja en verano es imprescindible contar con telas frescas, especialmente durante diciembre, enero y febrero, los tres meses más calurosos, con temperaturas que llegan a los 35ºC y no bajan de los 22ºC. Por otra parte, en invierno, también se necesitan telas frescas para el día, considerando temperaturas que fluctúan entre los 18º y 27ºC, junto a un abrigo ligero para las noches cuando refresca. Lluvias: Es siempre bueno tener a mano un paraguas o impermeable, considerando que puede llover en cualquier época del año, aún cuando éstas sean más frecuentes en el primer semestre. Artículo cortesía y original de EnViajes.cl, para seguir viendo este y otros artículos puede pulsar en el siguiente enlace:https://enviajes.cl/brasil/rio-de-janeiro/
Salvador de Bahía – Brasil – Turismo
Conocida como la Ciudad de la Alegría, una ciudad que deslumbra con las arquitecturas coloniales de su centro histórico, hermosas playas a lo largo de la costa Atlántica y una fascinante cultura, que pone en evidencia a través de sus bailes, gastronomía y música, su fuerte influencia africana. ¿Cómo viajar a Salvador de Bahía? Por avión: Desde diversas ciudades de Brasil y el resto de América, se pueden realizar viajes a Salvador de Bahía en avión, llegando al Aeropuerto Internacional Luis Eduardo Magalhaes, situado a 28 kilómetros del centro la ciudad. Por bus: Existen numerosas líneas de buses, que recorren las rutas terrestres de Brasil, llegando al Terminal Rodoviário de Salvador, localizado a 7,5 kilómetros del centro. A modo de referencia un viaje a Salvador de Bahía desde Río de Janeiro tarda 20 horas, atravesando aproximadamente 1200 kilómetros. Por crucero: Existen varias compañías de cruceros que realizan viajes a Salvador de Bahía, saliendo desde ciudades de la costa de Brasil, Argentina y el Caribe. El sitio de llegada es el Puerto de Salvador, localizado en el área de La Bahía de Todos los Santos. ¿Cuándo ir? Siempre es un buen momento para viajar a Salvador de Bahía, una ciudad con un clima privilegiado, donde se mantienen temperaturas cálidas y numerosos días de sol a lo largo de todo el año. Aun así, la estación preferida de los turistas corresponde al verano (diciembre a marzo), temporada con temperaturas más altas, bordeando los 30ºC y menos precipitaciones, si bien estas se manifiestan a lo largo de todo el año. Entre éstos meses, el más caluroso, corresponde a marzo con máximas de 30ºC y mínimas de 24ºC. En invierno (abril a julio), continúan las agradables temperaturas, con máximas bordeando los 27ºC y mínimas de 22ºC, sin embargo, a diferencia del verano, hay que considerar lluvias abundantes, especialmente concentradas en abril y mayo, por lo que no es la mejor temporada para visitar las playas de Salvador de Bahía. Durante los otros meses, (agosto a noviembre), las temperaturas suelen ser más frescas, especialmente en la noche, con máximas cercanas a los 26ºC y mínimas de 21ºC. Las precipitaciones mientras tanto, continúan ocurriendo, pero en menor proporción que en invierno. ¿Qué ver? Salvador es una metrópoli regional de casi tres millones de habitantes, con un sinnúmero de atractivos turísticos, mezclando altos y modernos edificios, invaluables arquitecturas patrimoniales y hermosas playas. La ciudad se encuentra dividida en ciudad alta y ciudad baja, con la catedral y el centro administrativo en la primera y el centro comercial urbano en la segunda. Su atractivo más famoso, lo constituye el centro histórico de la ciudad conocido como Pelourinho, una mágica área declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, hogar de invaluables testimonios históricos, que dan muestra del esplendoroso pasado de la ciudad, como capital de la colonia durante 250 años. En la ciudad misma como en sus entornos, también se puede disfrutar de las numerosas playas que se extienden a lo largo de la Costa Atlántica y la Costa de la Bahía de Todos los Santos, algunas balnearios urbanos muy concurridos como la famosa Porto da Barra y otras prácticamente desconocidas como la paradisiaca Praia do Forte a solo 70 kilómetros de la ciudad. Para los bohemios, Salvador de Bahía termina por encantar con su vibrante vida nocturna, con un amplia oferta de espectáculos y sitios para comer, bailar o disfrutar de tragos, dispersos en distintas áreas de la ciudad, tales como el Pelourinho o el barrio de Rio Vermelho. Algunos consejos y recomendaciones Alojamiento: Salvador cuenta con una vasta oferta de hoteles y hostales donde hospedarse con presupuestos para todo tipo de bolsillo. Por su seguridad y accesibilidad las mejores opciones de alojamiento se concentran en el Pelourinho, el área de playas de La Barra o la zona bohemia de Rio Vermelho. Carnaval: Si se viaja en temporada de Carnaval, es imprescindible tener una reserva previa de hospedaje, pues simplemente es imposible encontrar alojamiento con los miles de turistas que visitan la ciudad durante esos días. Moverse: Si bien el Pelourinho se puede recorrer fácilmente a pie, para conocer las otras áreas de la ciudad y sus más famosas playas, se debe descender a la ciudad baja ya sea en bus, en taxi o a través del Elevador Lacerda. Dinero: En la ciudad es posible cambiar dinero tanto en sucursales bancarias, casas de cambio o agencias de viaje, la mayoría situadas en el Pelourinho. El horario de bancos y casas bancarias es de las 10 hasta las 16 horas, mientras que los cajeros electrónicos están a disposición las 24 horas del día. Seguridad: Por úlitmo, como en todas las ciudades del mundo es importante tomar precauciones básicas de seguridad, como cuidar pertenencias en sitios con mucha concurrencia, evitar la ostentación de artículos de valor y las zonas no turísticas durante la noche. Al respecto el Pelourinho cuenta con mayor seguridad que áreas como Porto da Barra. Artículo cortesía y original de EnViajes.cl, para seguir viendo este y otros artículos puede pulsar en el siguiente enlace:https://enviajes.cl/brasil/salvador-de-bahia/
Parque Nacional Madidi – Bolivia – Turismo
Otra impresionante reserva boliviana de 1.895.740 hectáreas situada en el amazonas, característica por su variedad de paisajes que varían entre los montañosos, profundos cañones, selva, bosques nublados y matorrales. Al igual que el Parque Nacional Noel Kempff Mercado destaca por su biodiversidad, con una flora de 5.00 especies, 914 especies registradas de aves y otras 156 de mamíferos. Vale destacar que en los últimos años esta reserva ha saltado a la fama tras ser considerada por la revista National Geographic como una de las zonas con más biodiversidad del planeta y uno de los 20 lugares con mayor interés turístico a nivel mundial.
Lago Titicaca – Bolivia – Turismo
Ubicado a 3.812 metros sobre el nivel del mar, corresponde al lago navegable más alto del mundo, una inmensa masa de agua emplazada entre los paisajes nevados de la Cordillera de los Andes, en la frontera de Perú y Bolivia. Su mayor atractivo lo conforman sus numerosas islas, muchas de ellas con vestigios arqueológicos prehispánicos donde viven comunidades aymaras. Entre ellas la más famosa corresponde a la Isla de Sol, con ruinas incaicas que si bien son modestas tienen el atractivo de estar inmersas entre paisajes sobrecogedores abriéndose en sorpresivos miradores hacia el Titicaca.
Ciudad de Potosí – Bolivia – Turismo
Durante la época colonial fue una de las ciudades más prosperas de Bolivia y América, hogar de la mina de plata más grande del mundo situada en las faldas de la montaña conocida como Cerro Rico, enriquecimiento que impregnó a la ciudad de lujosas construcciones coloniales barrocas. Hoy declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, permite recorrer sus estrechas callecitas adoquinadas apreciando el antiguo esplendor de sus edificaciones coloniales, alzándose entre ellas iglesias, monasterios, templos, palacios y casonas. En sus alrededores se pueden visitar las joyas del Salar de Uyuni y el Parque Nacional Torotoro, ambos sitios imperdibles que entran en cualquier lista de los mejores lugares turísticos de Bolivia. Mayor desierto de sal continuo del mundo, una maravilla natural que se extiende por 12.000 km², alcanzando su mayor expresión de belleza entre los meses de enero y marzo, cuando cubriéndose ligeramente de agua, logra reflejar a modo de espejo perfecto las nubes del cielo. En medio de la blanca planicie, la Isla Incahuasi conocida también como “La Isla del Pescado”, constituye uno de los puntos de mayor interés del salar, escondiendo cientos de cactus gigantes que pueden llegar a alcanzar los 10 metros de altura. Artículo cortesía y original de EnViajes.cl, para seguir viendo este y otros artículos puede pulsar en el siguiente enlace:https://enviajes.cl/bolivia/lugares-turisticos-de-bolivia/
Asunción – Paraguay – Turismo
Se suele decir que Asunción, la capital de Paraguay, no es una ciudad demasiado atractiva. Posiblemente no sea el mejor destino turístico de Sudamérica, pero tiene un encanto especial, y hay que saber apreciarlo. Precisamente, no veréis muchos turistas por sus calles, de ahí que podamos apreciarla mejor. Bulliciosa, alegre, llena de vida y mercadillos, Asunción está situada en la orilla izquierda del río Paraguay y es conocida como la Madre de las Ciudades, porque desde ella partieron casi todas las expediciones que lograron la independencia de otras ciudades en Sudamérica, especialmente en el cono sur. Asunción destaca por sus mercadillos, su centro histórico, su arquitectura colonial y por las preciosas vistas al atardecer de la Bahía de Asunción. Ciudad que cuenta con siete colinas, tal vez en ocasiones su tráfico sea demasiado intenso y agobiante. Eso no quita para que descubramos una ciudad diferente, atractiva a su modo y llamativa. VISITAS – Panteón Nacional de los Héroes Situado en el centro de Asunción, se trata del edificio símbolo nacional de Paraguay. Se comenzó a construir en 1864, y se concluyó en 1934, tras la Guerra del Chaco. Allí descansan los restos de los grandes héroes de la nación paraguaya, sobre todo héroes de la Guerra de la Independencia y soldados desconocidos de la Guerra del Chaco. Algo parecido a Les Invalides, en París, pero más pequeño. – Palacio López Se trata del Palacio de Gobierno, construido por orden de Carlos Antonio López entre 1857 y 1864. Además de recorrer sus alrededores, con el Parque Atlántico desde el que se disfrutan de las mejores vistas del río y el Puerto de Asunción, hay que visitar el suntuoso interior. Todo está decorado con muebles parisinos, espejos de bronce y una escalera de mármol. De noche está hermosamente iluminado. – Jardín Botánico de Asunción La mayor extensión verde de la ciudad, lugar perfecto para ir a pasear o descansar. En sus 110 hectáreas podemos encontrar un zoológico, con todas las especies de la fauna sudamericana, el Museo de Historia Natural, el Museo Indigenista, un Vivero con más de 500 especies de plantas, y un campo de golf. Este jardín se creó como tal en 1919, y el zoológico unos años más tarde. – Museo del Cabildo Situado en la Plaza de la Independencia, este edificio era el antiguo Congreso de la Nación. Frente a la fachada veremos la estatua de Juan de Salazar y Espinoza, fundador de la ciudad, y una enorme fuente de agua. Resulta curioso el tono rosado de todo el edificio, parecido al de la Casa Rosada de Buenos Aires. También resultan curiosos los dos escudos de Paraguay que se sitúan en la parte superior de la fachada. – Catedral de Asunción La catedral que vemos hoy fue consagrada a mediados del siglo XIX, y es la sexta que se construyó en Asunción desde el siglo XVI. Situada en el barrio de Catedral, frente a la Plaza de la Independencia y junto a la Universidad Católica, su fachada, pintada de blanco y rosa, es bastante sencilla. Aun así, es un edificio muy hermoso y monumental. De su interior hay que destacar especialmente el altar de Nuestra Señora de la Asunción. – Plaza Uruguaya Situada entre los barrios de Catedral y San Roque, esta plaza posiblemente sea de las más bonitas de Asunción. Lleva este nombre gracias al General Artigas (que cuenta con una estatua en la plaza) quien liberó a numerosos presos paraguayos tras la Guerra de la Triple Alianza. Fue diseñada a finales del siglo XIX y, junto a las estatuas de varios escritores paraguayos, podemos ver en ella la antigua Estación de Ferrocarril y una densa arboleda que, en primavera, se torna de un color bellísimo.
Cataratas del Iguazú – Paraguay – Turismo
Consagradas entre las 7 Maravillas Naturales del Mundo, las Cataratas del Iguazú son el atractivo natural más visitado de la provincia de Misiones y uno de los más imponentes de la Argentina y el mundo.Las Cataratas del Iguazú se encuentran dentro del Parque Nacional del mismo nombre, a unos 20 kilómetros de la ciudad de Puerto Iguazú, al norte de la provincia de Misiones, Argentina. El río que las forma, también llamado Iguazú, nace en el estado de Paraná, en Brasil, y luego de recorrer unos 1200 kilómetros por una meseta, absorbiendo el caudal de los afluentes que se topa en su camino, llega a un punto donde una falla geológica forma una grieta en la llanura. Como si una gigante pala se hubiera hundido en la tierra separando sus lados. Sólo que en este corte, coincide con el paso de un río. Un río que viene recorriendo una geografía tranquila, sin demasiados sobresaltos, que de a poco encuentra en su transitar una seguidilla de saltos. Y de repente, unos 80 metros de desnivel que se convierten en una violenta sensación de vértigo: la Garganta del Diablo, el principal salto de las Cataratas, combinada con un constante tronar ensordecedor que se sumerge en lo más profundo, para luego mansamente, desembocar a pocos kilómetros en el río Paraná.
Tren de la Nariz del Diablo – Ecuador – Turismo
Recorrido en tren que atraviesa los paisajes de la Cordillera de los Andes, uniendo los poblados de Alausí y Sibambe a través de zigzagueantes caminos que conforman una de las rutas más complejas del mundo. Su punto más álgido lo conforma la colina apodada la Nariz del Diablo, lugar en el cual los rieles del tren descienden 80 metros prácticamente en forma vertical, gracias a una impresionante obra de ingeniería. Su punto de inicio corresponde a Alausí, un poblado que no deja de encantar por sus estrechas calles empedradas, balcones con flores y pintorescas casonas de adobe del siglo XIX. Desde ahí la excursión ida y vuelta dura aproximadamente 2 horas y media, parando por un tiempo en el poblado de Sibambe, lugar donde se puede disfrutar de la gastronomía típica de la sierra ecuatoriana o visitar su pequeño museo.