Viajes y tramites

Bucaramanga La Ciudad de los Parques – Colombia – Turismo

A nivel comercial y sobre otras ciudades de Colombia, Bucaramanga sí que tiene lo suyo. Y a su manera sabe atraer a colombianos y extranjeros a su territorio. Pero como resistirse a una ciudad guerrera que contra todo pronóstico se levanta, mejorando la calidad de vida y mostrando al mundo un nuevo rostro. Es idónea para los amantes de la naturaleza. Pues se encuentra rodeada de parques y paisajes naturales que invitan al esparcimiento y a la recreación. Olvidar la rutina y eliminar el estrés, es algo que fácilmente puede hacerse en Bucaramanga. Pues visitar Bucaramanga implica caminar por los senderos de los parques. Escuchar el sonido de la naturaleza y sus elementos en plena ciudad. Sonidos que se mezclan con la agitada vida comercial convirtiendo a la naturaleza en un punto de regocijo. Aunque sus paisajes naturales también son un excelente escenario para los aventureros. Porque sus montañas y sus vientos son excelentes para sobrevolar en parapente. Pero la recreación no solo depende de la naturaleza de esta ciudad. Bucaramanga ofrece varias festividades. Entre ellas resaltan la feria de la piña, la feria bonita y la feria ganadera.

Cinco países fáciles para la inmigración

El sueño de vivir en otro país puede ser muy atrayente, en especial teniendo en cuenta el país donde uno vive. Pero emigrar representa un gran desafío y no siempre es fácil de lograr. La mayoría e los países tienen reglas estrictas de admisión. Pero en esta nota te presentamos una lista de 10 naciones que hacen el desafío más llevadero. Austria Aclaremos una cosa: si a usted le gustan las casas lindas y baratas, esta no es su mejor opción. Austria es un país pequeño que opera como tienda hipster: pequeño, fascinante para mirar, pero tan caro que tendrá que donar al menos tres órganos para sostener el nivel de vida. Más allá del humor negro, Austria sí tiene algo a favor. Según el diario The Telegraph, Austria ofrece 10 permisos diferentes de residencia. Y ninguno requiere de inversión interna. Quienes no provengan de Europa o los Estados Unidos tendrán que solicitar la residencia desde el país origen. Bélgica La pequeña Bélgica con su sabrosa cerveza y sus hermosas ciudades permite con facilidad una residencia a largo plazo. ¿La condición? Tener un trabajo. Es cierto que la condición parece titánica. Pero muchos países europeos son celosos a la hora de darle empleo a un extranjero en detrimento de un conciudadano. En Bélgica, a usted lo dejarán buscar empleo como extranjero y después de quince días de trabajo efectivo, le darán un permiso de residencia. Belice Esta nación centroamericana de habla inglesa, bajo costo de vida y playas paradisíacas, es otra opción «friendly» para instalarse. Aquí se puede solicitar una residencia permanente después de un año de estadía. Para eso hay que ingresar con una visa de turista por 30 días, que habrá que renovar cada mes. Al llegar a las 50 semanas, se paga un arancel de 1000 dólares y tras algunos trámites burocráticos, no habría más problemas. Algunas estados provinciales o departamentos, sin embargo, exigen que usted deje el país por 15 días cada 6 meses. Canadá A contramano de las políticas duras y restringidas de EE.UU., Canadá es la cara amable del vecino del norte, incluso en lo que se refiere a inmigración.  Las reglas de inmigración de Canadá van desde excesivamente liberales hasta totalmente draconianas, dependiendo completamente de cuán hábil sea usted. Para quienes alcancen el nivel de cualidades o educativo que Canadá necesita, el trámite es casi express. Lo harán llenar un formulario. Si su puntaje es alto, probablemente entre. Ayuda tener familiares en el país o haber estudiado ahí. Costa Rica Con su onda «pura vida», esta es la opción «más feliz». Su población de hecho es una de las más felices del planeta, según el relevamiento «Happy Planet Index».  Costa Rica ofrece una visa «rentista» para personas con un ingreso mensual de 2.500 dólares al mes, durante dos años, o con una carta de un empleador garantizando que usted gana esta cantidad. Otra opción es invertir en un negocio o bienes raíces. La cantidad mínima es de 200 mil dólares.

Japón pretende atraer a 300.000 trabajadores extranjeros

Japón se está internacionalizando, y ese proceso se está acelerando.La fuerza motriz es el cambio demográfico: la población en Japón está envejeciendo rápidamente y disminuyendo en número. Agregando otros factores, incluidos unos niveles nunca vistos de turismo extranjero y los preparativos para los Juegos Olímpicos de Tokio en 2020, el resultado es una nación que necesita desesperadamente más trabajadores para llenar vacantes. Esa inminente crisis demográfica no agarró al país por sorpresa: hace décadas que se sabe. Pero como los distintos gobiernos se resistieron a tomar medidas drásticas, el problema ahora se ha vuelto mucho más urgente. El primer ministro, Shinzo Abe, quiere traer más trabajadores extranjeros a cambio de salarios bajos. Pero su propuesta de hacer llegar a centenas de miles de personas para ocupar puestos de trabajo hasta 2025 es altamente polémica. Especialmente en un país que, tradicionalmente, ha evitado la inmigración. A inicios de diciembre, el Parlamento japonés aprobó esa propuesta en un movimiento sin precedentes. En la práctica, los congresistas japoneses votaron a favor de la entrada de un número nunca antes visto de trabajadores inmigrantes: 300.000 en los próximos cinco años, a partir de abril. La nueva ley llega en una época de cambios históricos en Japón. Y el impacto puede moldear al país durante generaciones.   Más ancianos, más extranjeros Bhupal Shrestha es un profesor universitario que vive en Suginami, en Tokio, un área residencial conocida por sus calles estrechas, con tiendas de ropa de segunda mano y anticuarios. Vive en Japón desde hace 15 años, pero su camino para obtener un visado de «residente permanente» no fue fácil. Shrestha sintió «discriminación en cosas básicas como buscar habitación en la que vivir, abrir cuentas bancarias, solicitar tarjetas de crédito». También dice que es difícil para los inmigrantes hablar sobre la política del gobierno que les afecta. «La sociedad japonesa se está abriendo para los inmigrantes, pero ellos aún son conservadores en algunos lugares», opina. «Creo que se debe a la falta de oportunidades que tienen para el intercambio cultural con esas personas que llegan de fuera». Nacido en Nepal, Shrestha es uno de los 1,28 millones de trabajadores extranjeros que viven en Japón. Es un número récord, por encima de los 480.000 en 2008. Eso significa que los inmigrantes representan apenas el 1% de la población de Japón, comparado con el 5% en Reino Unido o el 17% en EE.UU. Casi el 30% de los trabajadores extranjeros en Japón vienen de China. El resto proceden de Vietnam, Filipinas y Brasil. El número es bajo porque no hay un incentivo para la inmigración. Siendo una nación insular, Japón ya fue ferozmente aislacionista. Hasta mediados del siglo XIX, aquellos que entraban o intentaban salir del país podían ser castigados con la muerte. Ahora, el Japón moderno se considera homogéneo, con una fuerte identidad cultural. Históricamente, las preocupaciones en el país sobre la inmigración están ligadas a varios factores: desde la percepción de que los extranjeros «se quedarían con los puestos de trabajo» de los nativos, hasta la ruptura cultural, pasando por el miedo sobre el aumento de la violencia en el país, reconocido mundialmente por sus bajas tasas de criminalidad. Pero hay un gran problema: el número de japoneses nativos está disminuyendo. La población cayó en casi un millón de personas entre 2010 y 2015. El año pasado disminuyó en más de 227.000. En paralelo, el número de residentes con más de 65 años representa el 27% de la población total, una cifra récord. Según estimaciones, el porcentaje de personas mayores llegará al 40% en 2050. En mayo, la tasa de disponibilidad de empleos alcanzó su mayor nivel en 44 años: 160 por cada 100 trabajadores. En otras palabras: hay muchos empleos disponibles que los japoneses más mayores no pueden hacer y que los japoneses jóvenes no quieren hacer. «La situación es terrible», describe Shihoko Goto, consultora del Woodrow Wilson Center, centro de estudios con sede en Estados Unidos. Recuerda que, en el pasado, la inmigración no era «vista como parte de una solución más amplia para algunas de las cuestiones que Japón está enfrentando actualmente». Mientras algunas empresas y políticos apoyan los planes de Abe, otros tienen reparos sobre cómo podrían cambiar a la sociedad japonesa. En busca de trabajadores «Pocos japoneses tienen experiencia trabajando y conviviendo con extranjeros», dice Masahito Nakai, abogado de inmigración en Tokio. Pero él dice que las personas están empezando a entender que se debe hacer algo. «Los japoneses están entendiendo que el país no puede quedarse sin su ayuda». Las necesidades más urgentes están en sectores como la construcción, la agricultura y la construcción naval, en todo el país. La hostelería y las industrias de venta al por menor también exigen cada vez más el inglés y otras habilidades lingüísticas, ya que el turismo continúa creciendo. Las áreas de enfermería y de asistencia a domicilio también siguen al alza, ya que son necesarios más trabajadores para cuidar de la creciente población de ancianos. Según un informe de noviembre, una vez que las propuestas de Abe fuesen aprobadas, se esperaría que más de 345.000 trabajadores extranjeros se mudaran a Japón para ocupar puestos en todos esos sectores en los cinco años siguientes. Hasta hoy en día, el país contorneó la cuestión de la importación de trabajadores extranjeros usando un «programa de entrenamiento técnico interno temporal». Eso permite que los jóvenes trabajadores o estudiantes trabajen en cargos de bajo salario entre tres y cinco años antes de volver a casa. Pero la iniciativa está siendo criticada por explotar a trabajadores con bajos sueldos y malas condiciones de trabajo. El año pasado, la prensa informó del caso de un vietnamita de 24 años que, inscrito en el programa, llegó a manejar basura nuclear radiactiva como parte de la limpieza en la ciudad de Fukushima, afectada por un desastre nuclear en marzo de 2011. El programa es criticado desde hace años. Muchos lo consideran «servidumbre disfrazada». Abe quiere permitir que trabajadores de baja cualificación permanezcan en el país durante cinco años. También pretende introducir un visado renovable para los cualificados, que podrían traer a sus familias. El objetivo del gobierno

Verona – Ciudad de amor – Italia – Turismo

Verona es una ciudad de la región Véneto, en el norte de Italia. Es una ciudad preciosa que es mundialmente famosa por la historia de Romeo y Julieta escrita por el gran dramaturgo inglés William Shakespeare; por eso, se conoce como la ciudad más romántica de Italia. Verona es la segunda ciudad artística por importancia de la región, después de Venecia. Fue un centro muy importante bajo los Etruscos, después bajo los Romanos, durante la Edad Media con el gobierno de la familia Scaligeri, y parte de la República de Venecia. La mayor parte de la ciudad conserva aún hoy su característico aspecto medieval ; pero conserva también muchos elementos romanos sea en sus arquitecturas que en sus calles , derechas y regulares. Lo que destaca en Verona es la grande riqueza de expresiones del arte, de la cultura y de la historia de la ciudad …es seguramente un lugar que se tiene que ver , y que por su grandeza puede ser visitada en un día o dos. Plaza Bra y la Arena de Verona La visita de Verona puede empezar desde la central, Plaza Brà. Si se llega en coche o en tren, se entra en la ciudad de Verona pasando cerca de Porta Nueva, importante ejemplo de arquitectura militar. Desde aquí se sigue un amplio vial con árboles, hasta llegar a la plaza Brà, que es un gran espacio caracterizado por edificios de épocas o arquitecturas diferentes. Vamos a ver cuáles son: Arena de Verona – Anfiteatro Romano La Arena de Verona es un antiguo anfiteatro de época romana es el símbolo de Verona en el mundo. La Arena de Verona es un amplia estructura que ha llegado a nuestros días muy bien conservada, aunque un terremoto en 1183 destruyó parte de sus arcos. El arena de Verona construida en el primer siglo d.C. es un elipse ancha 110 metros y larga 150, constituida por 72 arcos de piedra (por los cuales utilizaron el famoso mármol de estas zonas). En los siglos en ella se organizaron espectáculos de varios géneros: luchas, ferias, bailes, espectáculos de circo y muchos otros. Hoy es mundialmente famosa porque en ella se organiza un importante festival lírico desde el 1913; es un festival al aire abierto, que se desarrolla en verano, al cual participan cada año miles y miles de espectadores. Cada temporada se suelen representar 5 o 6 grandes obras líricas, desarrolladas en unos cincuenta espectáculos. Si queréis tener mayores informaciones sobre este tema, podéis leer nuestro post :Como asistir a un espectáculo en la Arena de Verona: El antiguo anfiteatro Romano. Asistir a un espectáculo en la Arena de Verona es absolutamente algo que os recomendamos hacer!. Vais a quedar impresionados por las grandiosas escenografías, la música y el majestuoso palco que puede tener centenares de personas.

Lecce – Italia – Turismo

El tacón de la bota es Salento, engastado en las aguas claras de los mares Adriático y Jónico, donde altos acantilados, esculpidos por el mar, se alternan con costas arenosas, verdes extensiones de vegetación mediterránea y pequeños “edenes” alcanzables solo por mar. Un viaje en el territorio de Lecce es un viaje en el tiempo, desde la atmósfera prehistórica a la civilización rupestre, de las arquitecturas medievales al barocco leccese, de las antiguas tradiciones a las habilidades de los maestros artesanos. Todo lo expuesto está condimentado por sabores intensos y genuinos, regalos de esta tierra generosa y del amor del hombre. La presencia de dos mares convierte esta parte de Apulia en un verdadero paraíso terrenal para quien desea unas vacaciones de sol, relax y diversión.La costa adriática, con imponentes acantilados y preciosas bahías engastadas entre el azul del mar y el verde de los pinares, ofrece un paisaje incontaminado, en algunos tramos aún en estado salvaje, con algunas zonas de gran interés ecológico, como la Reserva Natural de San Cataldo y el Área de los Lagos Alimini. Superada la ciudad de Otranto, bahías, ensenadas, acantilados y grutas naturales dibujan la costa, verdadera delicia para los apasionados del submarinismo. En Santa María de Leuca, el Adriático deja paso al mar Jónico que baña la costa occidental de Salento, con playas y fondos marinos de arena finísima que evocan imágenes de lugares del Caribe. Un armonioso paisaje, con llanas y suaves colinas, ocupa el corazón de la provincia, rico en aldeas que atestiguan la presencia del hombre desde la prehistoria. Antiguas civilizaciones procedentes de más allá del mar han marcado profundamente la cultura de esta tierra, tanto que en la Grecia salentina hoy todavía se habla la antigua lengua “Grika”. Viñedos y olivares dibujan cultivos geométricos, delimitados por bajos y pequeños muros construidos con la característica piedra local que aquí volvemos a encontrar, en su forma bruta, en las típicas granjas y en los dolmen y menhir, símbolos de la antigua civilización messapica. Es un libro de historia a cielo abierto, donde en el capítulo dedicado al Medievo se cuentan las antiguas aldeas y los poderosos castillos, y en el del Renacimiento las residencias señoriales que, aunque de menor forma, recuerdan el lujo y la elegancia de la capital. La oferta gastronómica es tan rica como la del paisaje: aceites, vinos, quesos, hortalizas, pasta fresca recuerdan los buenos sabores de antaño, obtenidos gracias a la elaboración artesanal de las materias primas. Que Ver? En una llanura a los pies de la meseta de Salento se encuentra Lecce, la Florencia del sur, una de las ciudades más interesantes de la región por su fisonomía arquitectónica típica del siglo XVII.  De orígenes muy antiguos, la ciudad tuvo dos momentos particularmente florecientes: el de la época romana y el del Reino de Nápoles. Justamente en este periodo hubo un gran desarrollo en la construcción de edificios, monumentos y palacios señoriales caracterizados por una lujosa y rica escenografía decorativa que hizo merecer a esta arquitectura la definición de barocco leccese. El fantasioso y minucioso trabajo de escultura fue facilitado por el empleo de la piedra local, dúctil y fácil de incrustar. Se puede iniciar la visita de Lecce por la Plaza de la Catedral, en un tiempo utilizada como ciudadela fortificada y hoy en día considerada el salotto más elegante de la ciudad. La grandiosidad de la Catedral, obra de Zimbalo, Cino y Penna, el alto campanario de cinco plantas, el Palacizo Vescovile y el Palacio del Seminario marcan el perímetro de la plaza, una de las obras monumentales que mejor representan la magnificencia del estilo de Lecce. Cerca se encuentra la Plaza San Oronzo que encierra, en su perímetro, la historia de la ciudad. Son testimonio de la época romana los restos del Anfiteatro, que en verano se convierte en escenario de representaciones teatrales y, en parte, la alta columna -que en su cumbre lleva la estatua de bronce del Santo en acto de bendecir- erigida el siglo V utilizando una de las columnas romanas procedentes de la antigua via Appia. Símbolo de la época del Renacimiento es el Palacio del Seggio, conocido como el Sedile, hoy utilizado para importantes exposiciones de arte, y la Iglesia de Santa María de las Gracias que custodia frescos y obras de madera. Detrás de la plaza está el Castillo de Carlos V, típica construcción defensiva que al rigor del aspecto exterior contrapone, en el interior, el estilo refinado de las arquitecturas señoriales. Imponente y majestuosa es La Puerta Rudiae, coronada por las estatuas de San Oronzo, Santa Irene y San Domenico y con dos pares de columnas colocadas a los lados del arco central, que da paso a la Iglesia del Rosario, impactante por la fantasía artística de su gran fachada. No se debe dejar de visitar la Basílica de Santa Cruz, donde la inspiración de los maestros pedreros se plasma en cada detalle de la monumental fachada que anticipa las bellezas del interior, un equilibrio armonioso entre la sobriedad de lo clásico y la fastuosidad del barroco leccese. Entre San Cataldo y Otranto, la costa del Adriático ofrece paisajes de belleza extraordinaria: blancos acantilados se contraponen al azul del mar, interrumpidos esporádicamente por playas arenosas, por el verde de la vegetación mediterránea, por charcos de agua salada separados del mar por una estrecha línea de tierra. Llegados a Otranto, se aconseja una visita al centro histórico de la ciudad, rodeada por las poderosas murallas y dominada por el Castillo que en el siglo XV hizo construir Fernando I de Aragón, ya la Catedral con un espléndido mosaico (siglo XII) en el pavimento que representa la historia de la época. Un tupido enredo de callejones y calles empedradas dibujan el corazón de la ciudad antigua, donde la blancura de las casas se mezcla con los colores de los talleres artesanos y las tiendas de souvenir. Porto Cesareo, Gallipoli y Torre San Giovanni son algunas de las “perlas” situadas en la costa jónica, con Santa María de Leuca que marca el límite entre los dos mares de Apulia. Entre Otranto y Gallipoli la fuerza del viento, unida a la del mar, ha esculpido

Guía Turismo y Viaje Turin – Italia

La ciudad sabauda…, la industria de Italia…, la ciudad de la Vecchia Signora…Turín tiene muchos apodos para definirla. Con la corona de  montañas nevadas mirando desde lo alto, Turín parece una cuna mecida por los meandros del río Po, el más largo de Italia que lo surca y recibe agua de sus tres afluentes, Dora Riparia, Stura y Sangone. El gusto con el que se cuida cada detalle en Turín dice mucho de sus habitantes, amantes de las cosas bien hechas, del esfuerzo empresarial, del ocio que brinda su ciudad, de la historia que desprenden los majestuosos palacios barrocos mezclados con los edificios de estilo Liberty (Modernistas), o de la sostenibilidad de una de las ciudades con más áreas verdes del país. Algo de Historia? No, mucha Capital del Piamonte, la región septentrional que limita con Francia, Turín tiene un pasado histórico harto complicado de resumir en pocas líneas. Ciudad celta, fueron los romanos quienes levantaron la colonia de Augusta Taurinorum que seguía una disposición ortogonal siguiendo el sistema militar del castrum. Con la caída del imperio los longobardos y posteriormente los francos ocuparon la ciudad, hasta la llegada de la Casa de los Savoia, mecenas del barroco turinés, y promotores de un reino independiente del dominio francés que durante el ‘800 se asomó al norte de Italia. El siglo XIX fue intenso en toda Italia, pero Turín vivió momentos de gran agitación política como el nombramiento de capital del país recién unificado en 1861, hasta 1864. Patria de uno de los padres del Risorgimiento, Cavour, en los albores del siglo XX surgieron importantes centros industriales que dieron lugar a empresas de gran renombre como Fiat u Olivetti. La cercanía de las montañas hace imposible no pensar en el turismo invernal de esquí que ofrece Turín. Y es que han sido varias las veces que la ciudad ha acogido eventos de alto calado como campeonatos del mundo de esquí o las olimpiadas de invierno de 2006. Que ver y que hacer en Turín. Actividades Los mercados de Turín constituyen en sí un monumento que admirar, ya sea para adquirir un souvenir, o para conocer la historia que los rodea y el ecosistema social que como un capa impermeable cubre y preserva sus tradiciones y productos.

Buzios – Brasil – Turismo

Antiguamente una aldea de pescadores, es hoy es uno de los destinos turísticos más apetecidos del sur de Brasil, famoso por sus 8 kilómetros de litoral, donde se extienden 23 playas, características por sus suaves arenas y aguas cristalinas ideales para la práctica de snorkel. También gracias a los fuertes vientos, es común ver en la playa la práctica de navegación a vela y aterrizaje de vuelo libre. En complemento a sus playas, Búzios tiene el encanto de su ambiente cosmopolita e incesante vida nocturna, albergando decenas de bares, restaurantes y clubes, que funcionan hasta altas horas de la madrugada, especialmente durante los meses estivales.

Olinda – Brasil – Turismo

Situada a solo 7 kilómetros de Recife, corresponde a una cautivante ciudad enclavada entre siete colinas, hogar del que es considerado el centro histórico mejor conservado de todo el Brasil colonial, famoso por sus coloridas arquitecturas, templos barrocos y estrechas callecitas de piedra que serpentean entre un accidentado relieve. Además de la belleza de su centro histórico declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, Olinda cuenta con una amplia oferta cultural, locales gastronómicos y un litoral con hermosas playas, ideales para los que quieran estar en contacto con la naturaleza luego de un recorrido por la ciudad histórica.

Recife – Brasil – Turismo

Conocida como la Venecia de Brasil, una ciudad que sin estar dentro de los lugares turísticos de Brasil más conocidos, encanta fácilmente por el contraste entre sus bellas arquitecturas coloniales y modernos rascacielos, junto a un idílico litoral con arrecifes de coral y aguas cálidas ideales para la práctica de snorkel. Un vasto patrimonio natural e histórico-cultural situado en sus entornos, complementan los atractivos de la ciudad, figurando entre éstos sitios de maravillas coloniales, como Olinda o Igarassu, situados a a solo pocos kilómetros de Recife, o el paraíso natural del archipiélago volcánico Fernando de Noronha a solo 1 hora de vuelo. ´

El Calafate y Glaciar Perito Moreno Argentina

El Calafate, corresponde a una pequeña ciudad a orillas del Lago Argentino, más conocida por considerarse la puerta de entrada al Parque Nacional de los Glaciares, reserva natural declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, hogar de extensos campos de hielo y hermosos paisajes de montañas, bosques y lagos.El glaciar más conocido del parque corresponde al Perito Moreno, una inmensa masa de hielo con un frente de 5 km de ancho y 60 m de altura, especialmente famoso por el inusual fenómeno natural de rompimiento del glaciar acontecido una vez cada 2 o 4 años, apreciable gracias a una serie de pasarelas que permiten contemplar el espectáculo a tan solo unos 400 m de distancia.